
Ampliación: OCDE mantiene sus proyecciones de crecimiento del PIB global para 2025 y 2026
PARÍS, 2 dic (Xinhua) — Está previsto que el crecimiento del producto interno bruto (PIB) mundial se ralentice del 3,2 por ciento en 2025 al 2,9 por ciento en 2026, en consonancia con las previsiones de septiembre, anunció la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) en su último informe de Perspectivas Económicas publicado hoy martes. Según el documento, el apoyo de las políticas macroeconómicas, la mejora de las condiciones financieras impulsadas por el optimismo sobre el potencial impacto de las nuevas tecnologías y el aumento de las inversiones y el comercio relacionados con la inteligencia artificial (IA) han fomentado colectivamente la demanda global. El informe alerta que nuevos incrementos o cambios bruscos en las barreras comerciales debilitarían el crecimiento, aumentarían la incertidumbre política y provocarían interrupciones significativas en las cadenas de suministro. Añade que los activos con altas valoraciones basadas en expectativas optimistas sobre el desarrollo de la IA pueden sufrir correcciones repentinas, mientras que la vulnerabilidad fiscal en muchos países podría obstaculizar el crecimiento económico. El informe también prevé que el crecimiento económico de Estados Unidos disminuirá del 2,8 por ciento en 2024 al 2 por ciento en 2025 y al 1,7 por ciento en 2026, debido al impacto de los aranceles adicionales, la desaceleración del consumo privado y el cierre del Gobierno federal. Mientras tanto, se espera que la economía de la Eurozona crezca un 1,3 por ciento en 2025 y un 1,2 por ciento en 2026. Los efectos completos de la subida arancelaria aún no se han dejado sentir, pero están empezando a ser cada vez más evidentes en las decisiones de gasto, los costes empresariales y los precios al consumo, especialmente en Estados Unidos. El documento subraya que, ante estos desafíos, las prioridades políticas clave son garantizar una reducción duradera en las tensiones comerciales, la incertidumbre política y la inflación, abordar los riesgos emergentes para la estabilidad financiera, establecer una senda fiscal creíble hacia la sostenibilidad de la deuda e implementar reformas ambiciosas para fortalecer el crecimiento de la productividad. El secretario general de la OCDE, Mathias Cormann, enfatizó que un diálogo constructivo entre países es esencial para garantizar una resolución duradera de las tensiones comerciales y mejorar las perspectivas económicas globales. En su opinión, un mercado mundial abierto que funcione bien trae consigo mejores niveles de vida y un crecimiento más fuerte. Fin







