
Imagen del 25 de septiembre de 2024 del director de La República, Juan Carlos Blanco, hablando durante un encuentro de la Agencia de Noticias Xinhua con medios de comunicación de Uruguay, en Montevideo, capital de Uruguay. (Xinhua/Nicolás Celaya)
(Multimedia) Entrevista: Expansión de BRICS ofrece oportunidad histórica para el Sur Global, afirma director de diario uruguayo
RÍO DE JANEIRO, 16 jul (Xinhua) — Con la reciente expansión del grupo BRICS, el Sur Global se enfrenta a una oportunidad histórica de transformar el orden mundial, afirmó Juan Carlos Blanco, director general del diario “La R” de Uruguay, en una entrevista exclusiva con Xinhua durante su participación en el Foro de Medios de Comunicación y Think Tanks de BRICS, que se lleva a cabo en Río de Janeiro.
Blanco destacó que la ampliación del grupo BRICS representa un punto de inflexión en el equilibrio geopolítico y económico internacional.
“Lo que antes era un foro de cinco grandes economías emergentes, hoy se transforma en una plataforma con un alcance mucho mayor. El BRICS+ puede convertirse en un actor clave para democratizar la gobernanza global y representar de forma más justa los intereses del Sur Global”, sostuvo.
Desde su perspectiva, la expansión del bloque no solo constituye un contrapeso a las potencias tradicionales, sino una plataforma constructiva y proactiva.
“El BRICS+ tiene el potencial de generar soluciones multilaterales más inclusivas y menos dependientes de los intereses hegemónicos del Norte”, afirmó.
Para lograr este impacto, Blanco enfatizó que es fundamental que los países miembros fortalezcan su capacidad de comunicación global y construyan un poder discursivo propio.
“Durante décadas, las narrativas dominantes han estado controladas por conglomerados mediáticos del Norte. Los BRICS deben avanzar en la creación de un ecosistema propio de medios, promover contenidos diversos y fomentar una agenda comunicacional común”, sugirió.
En cuanto a temas de relevancia internacional como el cambio climático y la reforma del sistema financiero global, el directivo consideró que “hace falta vocación política para coordinar posiciones y presentar portavoces legítimos”.
A su juicio, la diplomacia BRICS debe dar un salto cualitativo para incidir con mayor peso en las negociaciones multilaterales.
Respecto a la estructura institucional del grupo, Blanco hizo hincapié en la necesidad de fortalecer su arquitectura organizativa.
“Se requiere un secretariado permanente, una agencia de noticias propia y mecanismos de resolución de controversias. Además, sería clave fortalecer instrumentos financieros como el Nuevo Banco de Desarrollo y crear sistemas de pago en monedas locales”, afirmó.
Consultado sobre las experiencias de cooperación dentro de BRICS que podrían ser útiles para otros países en desarrollo, el periodista destacó el carácter horizontal de esta articulación Sur-Sur.
“No hay imposición de recetas ni condicionalidades. Iniciativas como los bancos de inversión, los intercambios educativos y los acuerdos en ciencia y tecnología son ejemplos concretos de cooperación solidaria (…) Es valioso que países con modelos políticos y culturales distintos hayan logrado construir una agenda común basada en el respeto mutuo”, explicó.
Frente a un contexto internacional marcado por el unilateralismo y el hegemonismo, el director del diario “La R” consideró urgente fortalecer la cooperación del Sur Global.
“Los grandes desafíos contemporáneos requieren respuestas colectivas. La articulación entre países del Sur debe consolidarse en todos los foros multilaterales y avanzar hacia bloques de negociación más eficaces”, opinó.
También remarcó la importancia de compartir buenas prácticas y establecer alianzas tecnológicas para enfrentar de manera conjunta retos como el cambio climático o la desigualdad digital.
Finalmente, al ser consultado sobre cómo debería evolucionar el BRICS, Blanco afirmó que debe ser “más inclusivo, más representativo y más efectivo”.
La diversidad dentro del grupo, según él, es una de sus principales fortalezas, pero la eficacia de BRICS dependerá de su capacidad de articulación.
“El BRICS debería ser un espacio abierto al diálogo con otras potencias emergentes, sensible a las demandas de los pueblos y audaz en la formulación de nuevos paradigmas de desarrollo”, dijo.
“El BRICS del futuro no solo debe reequilibrar el sistema internacional, sino transformarlo (…) Esa es la esperanza, pero también el gran desafío del Sur Global”, concluyó.